El día de hoy lleva el título de “…tu voluntad”.
Iniciamos el día con una oración de Teilhard de
Chardin titulada “Adora y confía” muy acorde con el lema del día. Y la
terminamos con el canto de las palabras de San Pedro Poveda: “Que yo piense lo
que tú quieres que piense, que yo quiera...”. Sin salir de la capilla, y con el
ambiente creado con la canción final, se nos reparte un trabajo para realizar
individualmente “… tu voluntad” para continuar con esa oración que es nuestra única fuerza para reconocer su voluntad.
Nos volvemos a encontrar en la sala de trabajo para
separarnos en pequeños grupos y trabajar el deseo, esa relación personal con Él que afecta a nuestras
aspiraciones, nuestros deseos más auténticos y nuestro impulso vital. Se nos da
luego un material para poder realizar un “punto y aparte” sobre cualquier idea
preconcebida, es “mi página en blanco” que queda como deberes para este año.
Por la tarde hay un espacio personal con el documento
“ser o hacer su voluntad” para discernir sobre la voluntad, de la misma manera que no es lo mismo “ser oración” o “hacer
oración”. Y acabamos todos juntos en gran grupo con el material “ … como en el cielo,
así también en la tierra” para trabajar la acción
en la construcción del Reino para hacerlo vivo y nuevo, aquí, en medio de
todos los hombres y mujeres. Salen temas de la fraternidad más allá de nuestros
trabajos; “sazonar lo desabrido” no hay fórmulas mágicas sino nuestro
testimonio en medio de la gente; nuestra fortaleza para la osadía del Reino;
necesidad de evangelizar y dar palabras de mediación; dar a conocer lo que
tiene la IT como Intered, como la realidad de cada ciudad ser luz sin salir fuera;
el desarrollo de nuestra acción debe ser un medio y no un fin; porque sabemos
lo que sabemos hacer podemos llegar al engaño, es mejor no hacer si no hay un
amor profundo, dejar que Dios sea en nosotros; la vida está configurada a la
voluntad de Dios, las cosas que hacemos son la oportunidad y prueba de
responder a la voluntad de Dios; nos reconocemos que hemos sido unos
privilegiados de vivir estar Jornadas y que ahora hemos de ser levadura y sal
para los demás.
Después, Pilar nos hace la presentación económica de
las Jornadas, las cuales han arrojado un superávit.
Antes de cenar celebramos en la capilla exterior la
entrañable “Eucaristía de envío”, oficiada por nuestro sacerdote y amigo Santi,
en el ofertorio nuestros niños y jóvenes nos cautivaron con una preciosa
canción a la Virgen María, la misa acabó con un ppt de un grupo músical Ixcis
con el canto “envíame” al mismo tiempo que recibíamos el “envío” con el símbolo de la imposición de manos. Nos
llevamos cada adulto como recuerdo un imán para la nevera con un dibujo
precioso donde aparecen unos niños en corro y pone PADRENUESTRO y los niños una
piruleta y un globo con una cara sonriente.
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